¿Qué son los filtros para la depuración del aire de entrada en las cabinas de pintura?
Se instalan como filtración primaria para el tratamiento del aire en la ventilación de las cabinas de pintura cerradas.
Normalmente son filtros de eficacia clase G4 según normativa EN779, situados o bien en el techo de las cabinas, o bien en paneles verticales, están diseñados para capturar las partículas grandes presentes en el aire (pelos, polvo, etc.). Su misión es filtrar de impurezas el aire de entrada a las cabinas de pintura, antes de que este entre al recinto de trabajo de las mismas. Este tipo de filtros solo se instalan en las cabinas de pintura o cabinas de aspiración y filtración de polvo, que son cerradas, en las cabinas abiertas, sin cerramiento, no se instalan.
Cuando hablamos de partículas grandes, nos referimos a todo aquello que se puede ver a simple vista, como pelos, polvo, o trozos de papel. De esta manera, estos filtros cumplen una doble función: prolongar la vida de los filtros principales (filtros de captación de pigmentos y nieblas residuales de pintura) y mejorar la calidad del aire dentro de la cabina de pintura, favoreciendo la salubridad de las personas que trabajan dentro de la misma.
Estos filtros son clave para el correcto funcionamiento de las cabinas de pintura. Cuando las partículas grandes no son filtradas, estas pueden obstruir los filtros principales y disminuir su vida útil. Además, cuando estas partículas entran en contacto con la pintura, pueden provocar pequeñas imperfecciones o motas, que pueden llegar a arruinar el acabado final deseado. Es por ello que utilizar estos filtros es esencial para asegurar un trabajo final con la calidad adecuada.
¿En qué se diferencian? Básicamente, la diferencia radica en su capacidad de filtrado.
- Los filtros clase G3 tienen una capacidad de filtración de partículas de hasta 5 micras, mientras que los filtros clase G4 pueden filtrar partículas de hasta 1 micra. Esto quiere decir que el filtro G4 es más efectivo a la hora de retener partículas pequeñas, aunque ambos son eficaces y se podrá elegir según las necesidades específicas de la cabina de pintura.
- Para alargar la vida útil de la cabina de pintura y obtener una filtración más adecuada en el interior de la misma, la filtración del aire de entrada al recinto de trabajo es una medida esencial a adoptar. Se puede conseguir con mantas sintéticas de filtro, fabricadas en material sintético, pudiendo ser realizadas a medida, según las necesidades específicas.
- Estas mantas están fabricadas con fibras sintéticas sin tejer de poliéster, compactadas térmicamente, libres de siliconas y resistentes a disolventes. Este tipo de manta es auto extinguible. Se confeccionan en diferentes capas de fibras creando una estructura progresiva proporcionando mayor densidad en la parte por la que se encuentra el aire limpio. Este tipo de manta cuenta entre sus características con una gran capacidad de retención de polvo y soporta altos caudales de aire.
El material de estos filtros es autoextinguible (es decir que, en caso de incendio en el interior de la cabina de pintura, estos filtros pueden arder, pero se extinguen o se autoconsumen y no propagan el fuego al resto de elementos de la cabina de pintura). Dotados también de una eficacia de filtración de hasta un 90% (en función de los fabricantes) y un comportamiento frente al fuego de F1, según normativa DIN 53438.
Otros parámetros importantes para este tipo de filtros es:
- la velocidad recomendada de flujo de aire, que es importante para no dañar la estructura de los filtros y que generalmente suele ser de 1,5 m/s.
- También tenemos que tener en cuenta la velocidad del aire de trabajo, o caudal de aire soportado por los filtros G4, que suele estar entre 1.700 a 5.400 m3/h/m2 en función del fabricante. Con estos 2 parámetros aseguraremos generar un buen funcionamiento de la cabina de pintura.
- También son parámetros a tener en consideración, los valores de presión aceptables (Pérdida de carga) que suelen moverse entre 20 Pa a 250 Pa para este tipo de filtros (en función del fabricante). La pérdida de carga hace referencia a la reducción de presión que experimenta un fluido cuando pasa a través de un filtro. Esta disminución de presión se debe a la resistencia que el filtro ofrece al flujo del fluido.
Por lo tanto, los filtros de entrada desempeñan un papel crucial en la protección de los sistemas de ventilación, al filtrar partículas y evitar daños en los componentes internos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, si estos filtros están demasiado contaminados y sometidos a una presión de aire excesiva, podrían surgir complicaciones.
Para prevenir este tipo de situaciones, es fundamental realizar un cambio de filtros de manera oportuna cuando corresponda. En lugar de considerarlo un gasto, se debe entender como una inversión a largo plazo, ya que, al reemplazar los filtros a tiempo, no solo evitaremos problemas que pueden suponer un coste elevado en cuanto a reparación, sino que prolongaremos la vida útil del sistema de ventilación y también contribuiremos a reducir el consumo de energía de los motores y de la cabina de pintura en general.
En resumen, la atención adecuada a los filtros de entrada, nos permitirá mantener un rendimiento óptimo del sistema de ventilación y de la cabina de pintura, prevenir daños innecesarios y promover una mayor eficiencia energética. No subestimemos la importancia de esta tarea y asegurémonos de realizar los cambios necesarios en el momento adecuado.