En cabinas industriales de pintura, la normativa ATEX («Atmósferas Explosivas») y una de sus normas más específicas al respecto, la citada UNE-EN 1127-1:2020, proporcionan directrices para la prevención y la protección contra explosiones en atmósferas potencialmente explosivas, incluyendo también la identificación de las causas de las explosiones y la selección de las medidas de prevención.
Dentro de las cabinas de pintura pueden formarse explosiones durante la pulverización de pinturas y solventes, así como también gases o polvos inflamables.
La normativa ATEX, respaldada por el Real Decreto 681/2003 que regula la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores expuestos a riesgos derivados de atmósferas explosivas y por la norma UNE-EN 1127-1:2020 (Atmósferas explosivas. Prevención y protección contra la explosión. Parte 1: Conceptos básicos y metodología), establece los requisitos para la prevención y protección contra explosiones, incluyendo la clasificación de zonas de riesgo, la selección de equipos adecuados (como luminarias ATEX) y la capacitación del personal.
Respecto a la clasificación de las zonas de riesgo, el Real Decreto 681/2003 en su ANEXO I clasifica en varias zonas, teniendo en cuenta la frecuencia con que se produzcan atmósferas explosivas y su duración:
Zona 0
Área de trabajo en la que una atmósfera explosiva consistente en una mezcla con aire de sustancias inflamables en forma de gas, vapor o niebla está presente de modo permanente, o por un período de tiempo prolongado, o con frecuencia.
Zona 1
Área de trabajo en la que es probable, en condiciones normales de explotación, la formación ocasional de una atmósfera explosiva consistente en una mezcla con aire de sustancias inflamables en forma de gas, vapor o niebla.
Zona 2
Área de trabajo en la que no es probable, en condiciones normales de explotación, la formación de una atmósfera explosiva consistente en una mezcla con aire de sustancias inflamables en forma de gas, vapor o niebla o en la que, en caso de formarse, dicha atmósfera explosiva sólo permanece durante breves períodos de tiempo.
Zona 20
Área de trabajo en la que una atmósfera explosiva en forma de nube de polvo combustible en el aire está presente de forma permanente, o por un período de tiempo prolongado, o con frecuencia.
Zona 21
Área de trabajo en la que es probable la formación ocasional, en condiciones normales de explotación, de una atmósfera explosiva en forma de nube de polvo combustible en el aire.
Zona 22
Área de trabajo en la que no es probable, en condiciones normales de explotación, la formación de una atmósfera explosiva en forma de nube de polvo combustible en el aire o en la que, en caso de formarse, dicha atmósfera explosiva sólo permanece durante un breve período de tiempo.
Clasificación de las zonas de las cabinas y protección contra explosiones
Las cabinas de pintura estarían generalmente clasificadas como Zona 1 o Zona 2 (dependiendo de la cantidad de gases, vapores y nieblas y de su concentración) y como zona 21 o zona 22 (dependiendo de la cantidad de polvo y de su concentración)
Para garantizar la seguridad en las cabinas de pintura, se deben utilizar equipos certificados ATEX, como luminarias, motores, ventiladores, etc.
Respecto a la Protección contra explosiones la normativa también establece medidas de protección contra explosiones, como una ventilación adecuada, la extracción de vapores y la selección de equipos con protección contra explosiones.
En resumen, la normativa ATEX es fundamental en cabinas de pintura para garantizar la seguridad de los trabajadores y prevenir accidentes causados por explosiones en atmósferas potencialmente explosivas.
La normalización permite mejorar significativamente parámetros como la calidad, la seguridad y el diseño, por ello también se confiere una gran importancia a las nuevas normas referentes a cabinas de pintura, como la UNE EN 16985:20018 (Cabinas de pulverización para materiales de recubrimiento orgánico. Requisitos de seguridad). Esta norma sustituye a la anterior UNE EN-13355:2005+A1 (Instalaciones de recubrimiento. Cabinas combinadas. Requisitos de seguridad), que hablaba de cabinas combinadas cerradas, aquellas en las que se puede realizar tanto el proceso de pintado como el secado.
La norma anteriormente citada y ya descatalogada, UNE EN-13355:2005+A1, establecía como requisito de seguridad en materia de atmósferas explosivas la existencia de un sistema de control que actuara sobre la ventilación de la cabina, sobre el sistema de pulverización de pintura y sobre el sistema de secado. El controlador debía asegurar que la pulverización y la calefacción sólo podían funcionar si la ventilación estaba funcionando. También informaba de que era necesario eliminar o reducir las fuentes de ignición. Estas pueden ser eléctricas, mecánicas o térmicas, así como asegurar que la ventilación es suficiente para mantener la concentración de vapores inflamables por debajo del 25% del Límite de Inferior de Inflamabilidad de la sustancia.
Normalmente, nos encontramos con que las cabinas de nueva construcción han sido fabricadas cumpliendo esta norma, pero no sucede lo mismo con las más antiguas debido a la ausencia de normativa. El resultado es que las cabinas nuevas tienen un diseño más seguro y por ello se recomienda que las cabinas antiguas sean modificadas y certificadas. Con esto se busca que cumplan con los requisitos de la norma, al menos los relativos a las fuentes de ignición y funcionamiento del sistema de control ya que la experiencia nos dice que los caudales de ventilación suelen cumplir con creces los requerimientos de caudal mínimo, siempre que se realice el mantenimiento recomendado por el fabricante. Esto no significa que las cabinas certificadas según la normativa presenten un funcionamiento completamente seguro debido a que los propietarios finales, por desconocimiento o negligencia, pueden haber realizado modificaciones en el sistema de control para que la máquina no dé alarmas y proporcione un funcionamiento más rápido y continuado. Además, podrían haber instalado equipos inadecuados en el interior de la cabina. Es obvio que todas estas modificaciones están desaconsejadas por razones de seguridad.
La vigente norma UNE EN 16985:2018, es una norma europea a la que se ha otorgado el rango de norma española y la misma proporciona requisitos y directrices para la gestión de la seguridad en las instalaciones de pulverización de pintura. Su objetivo principal es ayudar a las organizaciones a implementar medidas efectivas para prevenir accidentes, proteger a las personas y el medio ambiente, y asegurar un almacenamiento seguro de los productos que se contengan en su interior. Esta norma da un salto de calidad en la normalización y estandarización europea. La misma trata de todos los peligros y riesgos significativos, situaciones peligrosas y eventos peligrosos relevantes para las cabinas de pulverización para la aplicación de materiales de recubrimiento orgánicos líquidos y en polvo, cuando se usan según lo previsto y bajo las condiciones previstas por el fabricante, incluyendo también el mal uso razonablemente previsible.
Esta norma sustituye y aúna a las anteriores normas como la UNE EN-13355:2005+A1 que diferenciaban entre los diferentes tipos de cabina en función de la pintura a utilizar, las implantaciones de las cabinas y los sistemas de trabajo posibles. Con su aplicación, se añaden nuevas medidas y/o requisitos en el ámbito de la seguridad, de la ergonomía y el medioambiente.
Como conclusión, se puede asegurar que la integración de la normalización en los procesos industriales, es clave para el progreso tecnológico y la mejora de la productividad, siendo así posible avanzar en la consecución e incorporación de la normativa dentro de los estándares de las empresas.